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El aceite de oliva virgen es el obtenido del fruto recién recolectado del olivo (Olea europaea), y únicamente extraído por procesos mecánicos en condiciones que no alteran las características que tenía cuando formaba parte del fruto.

Nuestras aceitunas no tienen otros tratamientos más que su lavado, molturación, decantación de piel y semilla, centrifugado del extracto líquido y filtrado del aceite. Por tanto, el aceite de oliva virgen no es otra cosa que el jugo natural de la aceituna.

Recolección

Recolección

Las aceitunas recién recolectadas durante el día llegan al patio de la almazara todas las tardes entre diciembre y marzo.

Lavado

Lavado

Las aceitunas se lavan a través de un sencillo proceso en el que solamente interviene el agua. Los restos de hojas que acompañan son eliminados. La molturación se efectúa con una aceituna en su punto de madurez absolutamente limpia.

Selección

Selección

La calidad extra de nuestros aceites de oliva virgen son el resultado de una cuidada selección de las mejores variedades de aceituna en el mejor momento de maduración.

Un proceso continuo de extracción en frío y en circuito cerrado, permite mantener todo el sabor y el aroma del jugo de las aceitunas.

Molturación ecológica en dos fases

Molturación ecológica en dos fases

Las aceitunas frescas se muelen y la pasta es batida en frío (cámara gris de la izquierda) para posteriormente pasar (tubo verde) a la decantadora (máquina azul en el centro) que separa el alpeorujo del aceite. Finalmente, mediante centrifugación continua (cilindro gris a la derecha), el aceite queda libre de cualquier partícula de alpeorujo que todavía pusiese contener.

Centrifugación

Centrifugación

Centrifugación del denso aceite de la variedad cornicabra con su característico color dorado.

Almacenamiento

Almacenamiento

El almacenamiento en depósitos de acero inoxidable de pequeño tamaño permite la clasificación de las mejores calidades extra de aceites vírgenes y garantizan la conservación de sus propiedades.

Calidad

Calidad

Los más de 50 años de experiencia de la familia en la elaboración de aceites de oliva vírgenes garantiza una cuidadosa atención a cada paso del proceso con el fin de obtener productos de una calidad máxima que es apreciada en mercados nacionales e internacionales.

Las características analíticas y organolépticas de los mejores aceites de cada cosecha nos permiten seleccionarlos con garantía para los clientes más exigentes que buscan sabores naturales, puros y estables, sin conservantes ni aditivos.